A lo largo de este año descubriremos valores como la asertividad o la honestidad. Un nuevo curso en el que nos hemos propuesto cultivar valores, competencias y emociones a través de nuestro programa de Pensamiento Emocional.
Preparamos la base con las semillas del respeto
Educar en el buen trato y el respeto es la base para que nuestros hijos e hijas contribuyan positivamente en la sociedad. En este primer trimestre plantamos las semillas del respeto, la asertividad, la empatía y la solidaridad, cultivando así las competencias para una buena convivencia ¡Ya se sabe que para llegar a una colorida floración, lo primero es preparar el suelo y sembrar las semillas adecuadas!
Durante el mes de septiembre nuestros alumnos/as de Infantil han trabajado el valor del respeto. Un respeto que va íntimamente ligado a la habilidad de la asertividad. En el Colegio hacemos ver, desde pequeños, a nuestros estudiantes que la asertividad es la habilidad personal de comunicarnos para expresar nuestras opiniones, deseos y/o sentimientos, respetándose a uno mismo y a los demás. Además de beneficiarnos como personas, nuestra autoestima también mejora con el comportamiento asertivo y a su vez, nuestro comportamiento asertivo mejora con nuestra autoestima, convirtiéndose esta relación en una espiral altamente positiva.
R de respeto
Con motivo del Día Internacional de las lenguas, el pasado 20 de septiembre, los alumnos/as de Infantil convirtieron los cristales y puertas de sus aulas en una exposición de idiomas alrededor de la palabra RESPETO. El respeto es uno de los valores más importantes del ser humano, ya que es esencial para poder convivir en paz y armonía. La palabra proviene del latín respectus, que significa ‘atención’, ‘consideración’, y originalmente significaba ‘mirar de nuevo’, de ahí que algo que merezca una segunda mirada sea algo digno de respeto. Por lo tanto, el respeto implica “ver, aceptar y reconocer” al otro, incluso si no nos sentimos afines a esa persona.
Es fundamental transmitir el mensaje a nuestros alumnos/as que “Si quieres ser respetado es necesario que respetes primero al otro, ¿cómo podemos pedir o esperar algo que no damos?”.