En el Colegio Zola Las Rozas, creemos firmemente en el poder de tener un modelo educativo propio, el Modelo Educativo Zola. Esta autonomía nos permite ofrecer una enseñanza personalizada, cercana y efectiva, diseñada para que nuestros estudiantes crezcan en un entorno dinámico y enriquecedor basándonos en 5 pilares: Innovación, Pensamiento Emocional, Internacionalización, Creatividad y Responsabilidad.
Nuestra apuesta por la innovación nos aleja de los métodos tradicionales, con docentes que diseñan recursos propios mediante el Proyecto CREA, fomentando el aprendizaje activo. La internacionalización es clave, proporcionando una visión global que abre las puertas al mundo, siendo un centro bilingüe en inglés y alemán. Nuestro pilar de pensamiento emocional ayuda a los alumnos a gestionar sus emociones, promover la empatía y desarrollarse como personas íntegras. La creatividad es una de las habilidades más valoradas hoy en día, y en el Colegio Zola Las Rozas impulsamos a los estudiantes a innovar y pensar de manera original con el emprendimiento como bandera. Junto a esto, fomentamos la responsabilidad, no solo en su aprendizaje, sino también en sus acciones, formando personas íntegras, capaces de asumir retos y contribuir positivamente a la sociedad.
Nuestro Modelo Educativo propio implementa metodologías activas que fomentan la participación y el compromiso de los estudiantes. Además, un modelo educativo propio fortalece la colaboración entre docentes, mejora la coordinación y permite una mayor implicación de las familias en el proceso educativo. Este enfoque nos permite ofrecer una educación inclusiva, moderna y centrada en el desarrollo integral del estudiante.
Ventajas del Modelo Educativo propio
- Mayor flexibilidad: Un modelo educativo propio se adapta a las necesidades y contextos de cada estudiante, permitiendo que cada uno participe activamente en su aprendizaje.
- Cambio de rol del estudiante: Se promueve la autonomía, haciendo que los alumnos/as sean responsables de su propio proceso de aprendizaje.
- Rol transformador del docente: Los maestros pasan de ser meros transmisores de información a guías y acompañantes, asegurando una atención personalizada a la diversidad del aula.
- Diseño pedagógico colaborativo: Los docentes juegan un papel clave en la creación de las experiencias de aprendizaje, ajustándose a lo que realmente necesitan sus alumnos.
- Enfoque en valores y competencias: Se priorizan áreas como el pensamiento emocional, la creatividad y la responsabilidad, preparando a los alumnos para el futuro.
- Mayor protagonismo del estudiante: Los alumnos se vuelven más autónomos y motivados, desarrollando creatividad en su aprendizaje.
- Resultados competitivos: Aunque se cambien las metodologías, los resultados en evaluaciones convencionales se mantienen y se mejora el desarrollo de habilidades críticas para la vida.
Este modelo educativo propio asegura que nuestros alumnos no solo alcancen el éxito académico, sino que estén preparados para el mundo que les espera, desarrollando habilidades fundamentales como la responsabilidad, creatividad, y el pensamiento crítico.